PARA TI AMIGA PASTORA
Andalucía te cobijo en su regazo cuando viniste al mundo,
pero en un segundo cuando el Padre Celestial inhaló tu
celestial pureza y con virginal nobleza, te entregó a toda
la creación para ensortijar un nuevo andar de blancura sin igual
Las letras cuando las conociste fueron un imán así como
el desván donde las tardes de tu infancia con una hoja y un lápiz
soñabas cuando garabateabas versos, rimas o quizás sonetos
en tu infantil cabeza, entendiendo que nacía una poetiza de ensueño
Ya con tu corazón perfeccionado para estas lides, comenzó el cosmos
a rendirte pleitesía ante tanta poesía que brotaba de tu sencillez
acrisolada cada vez más alejada de la terrenalidad, pero exacerbada
por ese amor siempre creciente en ti para todos quienes te conocemos
Tus mejores años fueron peldaños para llegar a la cima bajo el manto
creciente de dicha y felicidad, cuando el Dios de todos los mortales
bendijo tus magnificencias con dádivas que colmaron de dicha
a tus ensueños cobijados en matices arrebolados de total cristalinidad
Pero la vida continuaba y nadie presagiaba los aires clandestinos
ante los desatinos del vil enemigo de la diafinidad, cuando un huracán
te puso al frente de la disyuntiva que con tu frente altiva, desafiaste
pero triunfaste en todos en todos los ámbitos reales y espirituales
El sendero está trazado para tu trajinar entre versos, sonrisas
y dichas, siempre enarbolando al amor en toda su dimensión
porque tu eres el prototipo de la luz, el sinónimo de vida, el proverbio
de paz, el verbo conjugado de mujer, madre y amiga por siempre
Nelson Lenin Aguinaga Ortiz
Mi querido
amigo Nelson, me hiciste llorar con tus bellísimas letras que fueron
directamente al corazón.
Agradezco a
éste medio por permitirme tener amigos
maravillosos. Y tú eres un amigo
del alma.
Sabes que te
quiero y te respeto por tu gran carisma, y por tu gran obra poética.
Gracias de
todo corazón. Te quiero mucho.
Pastora.